Wednesday, October 29, 2008

Un bebé a todo precio


Hoy en día gracias al avance de la medicina, nosotras las mujeres podemos tener hijos a la edad de lo imposible-la vejez. Querer ser madre es una prueba muy grande, no importa la edad. Pero hay muchas mujeres que aun siendo joven no pueden concebir, y recurren a las opciones que sus doctores y la medicina les ofrecen, ¿pero que tan capaces somos de afrontar tales pruebas?
¿Sabía usted que una vez que se detecta el problema de no poder tener hijos, la pareja (especialmente la mujer) debe asumir una serie de estudios? Este proceso puede ser fatigoso y hasta difícil de seguir ya que hay que esperar, semanas, meses y hasta años. La verdad es que ser madre vale la pena, pero también hay lados positivos y negativos cuando se afronta lo inesperado. Las mujeres somos mas susceptibles a aceptar la respuesta de nuestro medico, cualquiera que esta sea. Aun si es el hombre el que tiene la dificultad, somos nosotras que vamos a sufrir, y cuando la decisión de querer tener un bebe a todo precio es establecida el largo y doloroso camino solo empieza. Muchas mujeres llegan hasta obsesionar con ese bebe tan deseado que olvidan a su pareja y las consecuencias.
Proceso - El proceso de tener un bebe, requiere dos personas, y la pareja debe ser fuerte para poder hacer frente a ese problema. Muchas de las parejas pierden la felicidad por lograr tener un hijo, muchas han perdido los valores que tenían como pareja. Supongo que muchos de ustedes has visto la serie de televisión ‘Sex and the City’, en esta serie Charlotte una de las amigas de Carrie se obsesiona con tener un hijo que pierde a su esposo, ya que él se cansa de los tratamientos. Esta serie no forma parte de la vida real, pero lo que se ve ahí muestra como en realidad muchas de las mujeres reaccionan a la idea de querer ser madre a todo precio.
Historia, la vida real - Hace una semana atrás en la televisión francesa el programa ‘Tout une histoire’, presento el caso de varias mujeres y muchas de estas habían logrado tener hijos a una edad avanzada. Una de las participantes había quedado encinta a la edad de 46 años su esposo era varios años mas joven que ella y pues ella pensó que todo iría bien, si algo le pasa a ella (ella que era la mas avanzada en edad) su esposo aun joven podría cuidar del bebe. Tres años mas tarde su esposo muere y su hija no logra conocer a su padre (ella tan solo era una bebita). La mujer comenta que su vida fue dura porque muchas mujeres a su edad ya se van desgastando más fácilmente, y el cuidado de la niña no fue fácil. Ella se sentía mal cuando la iba a ver a la escuela porque la gente se preguntaba si ella era la madre o la abuela. Estos tipos de sentimientos son comunes y aunque no todas las mujeres pasan por la misma situación; hubo muchas madres en este programa, que aunque contentas de ser madres decían que pensarían dos veces antes de hacer lo mismo otra vez.
En estas últimas semanas la televisión francesa ha hecho mucho enfoque a las mujeres que optan tener hijos sin importar las consecuencias. Según ‘tout une historie’ muchas mujeres cada año pierden la vida por querer tener un hijo (mas aun a la vejez). La experiencia de otras es quedar en el coma, pero ni siquiera esto nos frena. Muchas parejas europeas van en buscan de ayuda a las clínicas en España donde se les da la oportunidad de tener un hijo “in Vitro”. Hay otras que acuden a Grecia donde no hay una lista de espera como en España, cualquiera que sea la esperanza ahí van las parejas.
Regalo de Dios - Creo que tener un hijo es el regalo más grande de Dios, pero mujeres hay que pensar en todo. No podemos segarnos, ni darle la espalda a la verdad. Hay que examinar las opciones, si realmente queremos ser madres, hay que estar conciente que este trae riesgos. La comunicación es vital, hoy en la día con el avance de la medicina podemos saber si el bebe que tanto deseamos es posible, y si no lo es, examinar las alternativas y sus puntos bajos es importante. Si ya estas en el vejez, cuales son las consecuencias que algo vaya mal. Todas tenemos derecho a la felicidad de un bebe, pero no le robemos esa felicidad a nuestro bebe de no estar presente para verlo dar sus primeros pasos, decir mama y hasta verlo crecer.

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